Sería bastante obvio que la chef Jen Williams fuera una impulsora del buen comer, y en cierta medida, esto es cierto. Williams ha trabajado en cocinas desde aquí hasta Chicago, y ahora es dueña de JayCee Hospitality, una empresa que brinda servicios completos de banquetes y consultoría. "Me comí todo el queso", dice entre risas. "Como chef, podía comer lo que quería... y eso hice. Y luego mi cuerpo se rebeló". Williams era la chef del querido Magnolia Cheese Co. y chef ejecutiva de Sera. Ambos conceptos tenían como característica principal las cenas estilo tapas, a disfrutarse lentamente con una buena copa de vino.

Williams adoptó un Enfoque en Plantas —uno de los componentes clave de las comunidades Blue Zones, donde la gente tiene vidas más largas y saludables— luego de empezar a escuchar a su propio cuerpo. "Seguí una dieta vegana durante más o menos un año porque estaba aumentando de peso y tenía problemas hormonales", señaló. "Fui con muchos médicos y nadie podía diagnosticarme nada. Hasta que fui a un especialista en fertilidad durante la cuarentena de COVID", dijo. El médico le recomendó hacer la prueba de seguir una dieta vegana. "Las proteínas animales estaban causándome problemas de aumento de peso y estaban afectando la manera en que mi sistema procesaba los alimentos", indicó.

En las regiones Blue Zones, la carne es más un condimento que un plato principal. "La manera europea de comer le presta más atención a lo que uno come", dijo. Las porciones son más pequeñas y las personas saborean las comidas en compañía de sus familiares y amigos en lugar de comerlas en el auto o mientras están rumbo a algún evento. "La nuestra es una sociedad capitalista y eso invade todos los aspectos de la vida", señala. "Los excesos son más apreciados. Fuera de los Estados Unidos, realmente no existe la capacidad de comer todo lo que quieras cuando quieras".

Williams lo llama la manera "súper-dúper-mega-plex" de hacer compras, lo que significa que podemos obtener, por un precio relativamente barato, frutas y verduras fuera de la estación normal, así como bolsas extra grandes de alimentos procesados. La gente que vive en las comunidades Blue Zones no se da el lujo de comer fuera de casa con frecuencia ni tiene congeladores de gran capacidad, así que usa lo que tiene disponible. Es así que algo que distingue a muchas de las comunidades Blue Zones es la compra de productos locales frescos, un tema que a Williams le apasiona.

"¿Por qué no estamos apoyando a las personas que están haciendo que nuestra agricultura crezca?", pregunta, preparando el terreno para hablar de un tema que se ha convertido en su Propósito, otro de los principios Power 9 de Blue Zones. Despertarnos y vivir con un Propósito puede agregarle años a nuestras vidas. Cuando Williams se mudó nuevamente a Fort Worth, empezó a hacer compras en el Cowtown Farmers Market y a trabajar con el mismo. "Fue así que pude conocer a la gente local". Y los mercados agrícolas son mucho más que solo cultivar productos. "Permiten cultivar relaciones y saber qué está bueno y qué está en temporada", agregó. "Además, me encanta jugar en la tierra". Williams disfruta el tiempo que pasa conversando con los agricultores y artesanos porque "ellos tienen las mejores cosas", dijo. "Siempre hay algún consejo de jardinería genial del que nunca he escuchado". Y cuando compramos productos locales, nuestros alimentos no están atorados en un barco o camión de carga. "Sabes de dónde vienen y sabes que no contienen químicos", dice Williams.

Ahora Williams se describe a sí misma como "medio vegana". Para ella, se trata de lograr un equilibrio. "En verdad no voy a dejar de comer ostiones y caviar", dice nuevamente entre risas. Como chef, tiene que probar lo que cocina, así que es muy difícil abstenerse por completo. Pero con su negocio de banquetes, su objetivo es ayudar a la gente a reducir la cantidad de productos lácteos, huevos y proteínas animales en sus dietas. "No escuchamos lo que nuestros cuerpos nos dicen. "No nos tomamos el tiempo de descifrar qué es lo que está causando nuestra enfermedad", dijo.

Si están pensando "bueno, es una chef, así que para ella debe ser fácil hacer magia cocinando con plantas", tienen algo de razón. "Sé cómo cocinar diferentes alimentos y siempre me han encantado las verduras", dijo Williams. El truco es no hacer que cocinar verduras sea tan difícil.

"Siempre preparo hongos cuando tengo un antojo de carne", señala. "Los hongos se prestan para una textura más carnosa". La gente no entiende cómo cocinar con hongos, y eso es bastante típico para la mayoría de verduras. "Hay que tratar a las verduras como si fueran carne", dijo. "El aceite de oliva y un buen aderezo realzan la caramelización de las verduras, y de ahí sale el sabor".

En un guiño al principio Power 9 de relajarse ––una manera de revertir enfermedades a través de estrategias para aliviar el estrés–– Williams nos anima a tener en cuenta qué entra a nuestras vidas, mentes y estómagos. "Seguir una dieta vegana me aclara la cabeza y me hace sentir mejor", dijo. Pero para darse cuenta de esto, tuvo que tomar la decisión consciente de eliminar ciertos alimentos de su dieta, y de luego volver a introducirlos. "Haz que tu tiempo cuente, y haz de ti mismo/a una prioridad", dijo Williams. "No pongas excusas".